Las negociaciones son una parte de un emprendimiento del que nunca somos ajenos, y que, además, debemos saber bien como elaborarlos para lograr contratos y ventas lo más favorables para nosotros.
Hay mucha información y teorías sobre cómo llevar una buena negociación, pero, para no ser tan elaborados, aquí vamos a comentar 8 características cortas para lograr destacarse en esta tarea:
1 – Ten buen sentido del humor
Normalmente las negociaciones son situaciones en donde todos cuidan sus intereses y no suelen hacer bromas o tomárselo a la ligera. Por eso, para lograr obtener contratos que te favorezcan, es importante romper el hielo y esa barrera que se suele crear entre las personas.
Tener un buen sentido del humor te permitirá relajar a los negociadores, permitiendo un mejor y más amigable dialogo. Pero, desde luego, ten cuidado con los comentarios de este tipo ya que si lo haces mal puedes dar una mala imagen no sólo tuya sino también la de tu empresa.
2 – No te apures
A veces es común que al momento de firmar un contrato el tiempo nos apure, pero es importante saber que el tiempo es nuestro amigo.
Cualquier negociación en el que nos sintamos presionados por el tiempo, ya de por si no dará buen resultado.
Por eso, tomate el tiempo para leer los contratos, las condiciones, y escuchar que dicen las personas y analizarlo. En todo caso, siempre puedes pedir un día de tiempo para comentarlo con tus asesores o socio.
3 – Lee sobre lo que vas a negociar
Antes de empezar la negociación, tomate el tiempo de examinar los productos o servicios que estás por adquirir, investiga que otras opciones hay en la red y que consejos dan a la hora de adquirirlos.
Así también, mira la página web de la empresa con la que vas a trabajar para conocer cuál es su historia, sus expectativas, y sus objetivos.
Teniendo esto claro te dará una posición mucho mejor que los negociantes ya que sabrás bien que ofrecer y que descartar.
4 – Ten buena actitud
Esto es algo básico, ir de mal humor o con actitud engreída no te dará nada. Aunque la reunión sea algo que no quieras hacer, muestra las mejor ganas para hacerlo, ya que de esta forma lograrás sentir cómodos a tus posibles nuevos socios.
Además, ¿quién sabe que no puedas lograr un contrato interesante para tu emprendimiento?.
5 – Los contratos pueden cambiar
Es normal pensar que una vez impreso el contrato ya es obvio que las condiciones no se pueden cambiar. Sin embargo, hay que tener en claro que, a lo mejor, podemos cambiar algunas condiciones si es que ambas partes están de acuerdo con esto.
Si el mismo necesita aprobación legal para hacerse, ¿qué es mejor, esperar unos días a que se apruebe o salir con un trato en donde ninguna de las dos partes se sienta a gusto, y todo por no esperar un poco para cambiar el contrato?.
6 – Piensa algunas cosas que puedes dar
A veces es necesario dar algo de nosotros para que las otras personas no retribuyan de mejor manera. Entregar algunos productos extras o un poco más de dinero no es malo si en verdad necesitamos obtener esta venta o contrato.
Piensa que, a veces, algunas cosas que ganamos afectan positivamente otras ares de nuestro negocio además de la monetaria.
7 – Habla fuerte y con seguridad
No gritando, pero se claro cuando hablas y no murmures. Esto permitirá mostrarte como una persona seria y fuerte, en cambio, si lo hacemos murmurando o hablando para uno mismo, se puede tomar como que “somos” débiles y el del frente puede aprovecharse de eso.
8 – No intentes negociar todo en una sola entrevista
Si es necesario analizar varios puntos de la negociación, es mejor tomarse días para lograr abarcar todos los puntos de manera adecuada y con detalle.
Cubrir todo puede ser estresante, y es posible que por la cantidad de información se pierdan algunos detalles o nos equivoquemos a la hora de aceptar o no un contrato.
Esperar unos días no provocará nada a nuestra empresa, y nos dará a nosotros, además, el tiempo para revisar los puntos fuera de la presión que tiene una negociación.