Los negocios y el emprendimiento son un factor clave en nuestra sociedad. Es por eso que se trata de algo que no sólo hemos de aprender cuando somos adolescentes o adultos, sino también en edades más tempranas. Y es que los niños y el emprendimiento son una excelente dupla, incluso se puede trabajar para lograrlo; tan sólo es necesario saber cómo hacer que un niño se convierta en emprendedor.
Desde pequeños le enseñamos a los niños que tienen que estudiar para graduarse, y graduarse para conseguir un buen empleo que deben conservar para el resto de su vida. De esta manera, la única opción de ganar un poco más de dinero es un aumento de sueldo que les ofrezca su jefe.
Pero, ¿por qué no enseñar a los niños a emprender? El modo de pensar, tanto nuestro como de las generaciones futuras, debe cambiar. Hacen falta más personas emprendedoras, más creatividad, más genios y personas que sean capaces de ofrecer productos y servicios nuevos para hacerlos llegar a gente de manera inteligente.
¿Cómo lograr un buen proyecto entre los niños y el emprendimiento?
Lo primero que se debe hacer es enseñarles el precio del dinero. Si, así es, el precio del dinero es el valor que le da cada persona a los ingresos que obtiene. Enseñar a los niños a ganar dinero haciendo labores específicas, ya sean tareas del hogar o trabajos sencillos, les enseñará a esforzarse para conseguirlo. Luego, cuando sean un poco más grandes, una cuenta en el banco es ideal para crear el hábito del ahorro.
Es importante motivar a los niños a la hora de realizar trabajos, así se puede comprender la relación entre el esfuerzo y las ganancias más satisfactorias, algo que se vuelve fundamental en el camino del emprendimiento.
Es de vital relevancia que inculques la idea del negocio y del emprendimiento a los niños, que ellos comprendan que deben trabajar por lo que les gusta, por lo que les apasione y no por aquello que los demás quieren que hagan.
Si tienes dos hijos o más, hacerlos trabajar en equipo es lo mejor, pues los negocios no se manejan solos y es necesario tener un equipo completo de socios y de empleados para alcanzar la meta y llevar la empresa hacia un crecimiento inminente.
Uno de los aspectos fundamentales en relación a los niños y el emprendimiento es que compartas con ellos. Entender sus inquietudes y dudas es necesario, pues son sólo críos y aprenden todo lo que ven y escuchan. No se trata de moldear su mente, sino de abrirles el conocimiento para que ellos mismos decidan lo que quieren ser.
Utilizar juegos didácticos que le den habilidad mental al niño también es una buena idea, pues en una empresa probablemente nos tengamos que enfrentar más de una vez con un problema que requiera de una solución inmediata, por lo que necesitamos una mente atenta y abierta en todo momento.
Asegura un futuro provechoso para tu hijo. Los negocios y el emprendimiento no son un camino fácil, pero, si le das todas las herramientas necesarias, estarán preparados para enfrentar el camino.
